Los 10 errores de los mecanismos de defensa del amor

Algunas veces cuando te interesa de verdad alguien, siempre hay algo que no resulta. Cuando estuve enamorada (que fue 2 veces) terminé haciéndolo todo al revés. En un inicio pensé que mi capacidad de amar era arbitraria porque algunas ocasiones me comportaba indiferente e incluso hacía daño a quien quería (una especie de Helga menos cruel); la mayor parte del tiempo trataba de portarme afectuosa y demostrar mi cariño, pero no en plenitud porque sentía un temor.

De acuerdo a la psicología esto se debe a los mecanismos de defensa que tenemos las personas y tras varias experiencias los ponemos en práctica, la mayoría de casos, inconscientemente. Un mecanismo de defensa, de acuerdo con Freud, es la respuesta del conflicto entre los componentes de la psiquis:  «El Yo lidia con las exigencias de la realidad, del Ello y del Superyo de la mejor manera que puede. Pero cuando la ansiedad llega a ser abrumadora, el Yo debe defenderse a sí mismo. Esto lo hace bloqueando inconscientemente los impulsos o distorsionándolos, logrando que sean más aceptables y menos amenazantes». Es por eso que yo transformaba los sentimientos de cariño o amor, por sus contrarios, para evitar el sufrimiento de una decepción y, en algún, momento justificar con mi actitud el fracaso.

Es normal sentir inseguridad frente a situaciones nuevas, sobre todo, si se tiene una experiencia que no ha sido favorable para nuestro crecimiento personal; sin embargo, no podemos juzgar a todas las personas por el error de pocas y tampoco podemos negarnos la oportunidad de vivir nuevas experiencias.

A continuación compartiré algunas de los errores que afectan al amor por los mecanismos de defensa:

  1. Callar palabras de amor, por temor a sonar cursis.
  2. Dar prioridad a terceros cuando la situación involucra solamente a la pareja.
  3. Pretender que somos la otra persona y conocemos perfectamente su vida; o, por el contrario, asumir que el otro nos conoce demasiado y evitamos transmitir lo que sentimos o pensamos.
  4. Dejar que el otro resuelva sus problemas solo; aún con nuestra presencia podemos apoyar.
  5. Negar los problemas que afectan la relación.
  6. Armar escenas de celos injustificadas.
  7. Ser demasiado comprensivos, porque pasamos por alto faltas que poco a poco afectan a la relación.
  8. Culpabilizar al otro de errores propios o que ni siquiera tienen causantes.
  9. Justificar(se) para no asumir los errores de pareja.
  10. Tratar de compensar la falta de cariño con regalos.

Después de todo, sentir el amor es lo más maravilloso que existe en la vida y no tendría ninguna sentido quedarnos imaginando como sería vivirlo, por el temor a no arriesgarnos.